968 941 231/ 607 199 183 info@sanchezsalvador.es

A la hora de realizar la valoración de una vivienda energéticamente eficiente y edificada desde el paradigma de la sostenibilidad y que cumpla los protocolos europeos 20/20/20, nos encontramos con varias incógnitas a resolver.

El principal problema con el que nos encontramos, si queremos realizar la valoración mediante el Método de Comparación, es la falta de testigos o muestras comparables puesto que en la actualidad es muy reducido el número de viviendas construidas con criterios ECO y políticas de bajo consumo. Al no haber todavía un mercado representativo de este tipo de inmuebles, se terminan comparando con viviendas standard que han requerido menor inversión y con peor calificación energética.

Parece lógico prever que una vez que empiecen a salir al mercado viviendas eficientes y con consumos casi nulos, serán estas más demandas y por lo tanto su valor de mercado se situará en un rango significativamente superior al de la vivienda tradicional, puesto que la sociedad tiende hacia una mayor concienciación medioambiental, la inversión en su construcción es mayor y por  el gran ahorro económico en los diferentes consumos energéticos (agua caliente sanitaria, calefacción, electricidad, aire acondicionado …).

Por lo tanto parece probable que una vivienda eficiente pueda incrementar su valor de mercado entre 15 y un 20 %, por lo que dicho factor será un parámetro decisivo en la valoración de los inmuebles.

Una alternativa, sería utilizar el método de Actualización de Rentas, aunque tampoco se dispone de datos suficientes de rentas de inmuebles con calificación energética, si podríamos realizar una estimación del porcentaje de ahorro económico en costes energéticos y el impacto que supondría sobre la comparativa de rentas de inmuebles normales, puesto que el arrendatario de una vivienda eficiente podría afrontar el pago de su mensualidad con mayor holgura, debido a que los importes de las facturas relacionadas con los consumos de un inmueble eficiente son más bajos.

Otra alternativa sería el Método del Coste, calculando el valor del suelo por Comparación o por el Método Residual Estático y sumar el valor del vuelo por el Método del Coste de Reposición.

Como conclusión cabe destacar que el tasador inmobiliario tradicional no está preparado para valorar este tipo de inmuebles, y por lo tanto se ha de trabajar en la elaboración de unos estándares que guíen a los profesionales tasadores en de este tipo de tasaciones, puesto que deben estar preparados ante la revolución que se prevé en las viviendas de nueva construcción, puesto que contarán con grandes avances en eficiencia energética y sostenibilidad, así como en domótica, conectividad, realidad aumentada, seguridad, etc.